Por Juan Tomás Valenzuela
Ya Leonel, perdió la magia,
según se puede observar,
pues desde que empieza a hablar,
lo tildan de escatofagia.
Ya su verbo no contagia
como otrora solía hacer.
Vemos que ni su mujer
le hace caso a su elocuencia,
y hasta definen vacuencia
lo del retorno al poder.
Le han caído los palitos
a este canúco angurrioso,
que es tildado de baboso
hasta por Domínguez Brito.
Aquel hablar exquisito
que tanta fama le ha dado,
no muestra los resultados
que mostraba el 2010,
cuando se rendía a sus pies
todito el conglomerado.
Ayer vi a Domínguez Brito,
Temo y la “Bella Salúa”
tirándole una ganzúa
al que antes fue “el erudito”.
Aunque parezca inaudito,
estos que fueron aliados,
ahora están emparentado
con nuestro “Benefactor”,
y le han dicho hasta impostor,
al verlo desamparado.
Si Leonel, le dá una audiencia
a su Comité Central,
es porque quiere buscar
remedio pa’su dolencia.
Fue tanta la indiferencia
dispensada al organismo,
que Temo, llamó cinísmo
a la estrategia de ayer,
en la que el Dr. Leonel
les dá su fe de baustimo.
Por más vuelta que le busquen
al tema de las primarias,
se van pa’la funeraria,
no importa cuanto se ofusquen.
No ha valído que rebusquen
una salida al conflicto,
pues ni ungido, ni erudito
darán su brazo a torcer,
y yo no creo que Leonel
le tumbe el pulso al mudito.
Juan de los Palotes
24 octubre 2018