Por Washington Cabello
(WASHINGTON, D.C., Estados Unidos).- Ningún embajador de este país acreditado en otro, actúa de forma medalaganaria, ni por motus propio, todo es un plan, una política de estar atentos a los peligros que implica el requebrajamiento de la democracia de ese país para sus intereses.
Y estamos seguros de que algo han observado en el accionar de la Junta Central Electoral (JCE), en torno a las primarias de este domingo, que realizaran los partidos de la Liberación Dominicana (PLD) y Revolucionario Moderno (PRM).
En ese sentido, no nos cabe duda de que la embajadora de los Estados Unidos, ante la República Dominicana, Robin Bernstein, fue ordenada a inmiscuirse en este certamen (porque algo no anda bien), por lo que esta invitó a visitarla al presidente del organismo, para solicitarle «personalmente» (no por correspondencia, ni otra vía) supervisar y observar el desarrollo de las elecciones primarias.
Castaños Guzmán, no sabemos sus motivos, aclaró que fue a solicitud de la embajadora dicho encuentro en la sede diplomática de dicha embajada, donde la conversación giró en torno al proceso de elecciones primarias simultáneas del PLD y PRM. El acta 28/2019, no específica la fecha de la reunión.
O sea que lo llamaron a presentarse ante su despacho, ella no se molestó en acudir al de él.
Eso alienta un poco de que el pueblo dominicano no esta solo, y que la Junta, debe de obrar con transparencia.
Imagen de archivo: Del 10 de octubre del pasado año, cuando esta le visitó
