Por Sin Reservas
No existe dudas que el accionar delincuencial de la prensa en la República Dominicana, ha contribuido con la impunidad reinante en el Estado, donde prácticamente no escapa ninguna institución.
El presidente del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) condenó que el gobierno vote miles de millones que debería de estar destinados a resolver los problemas de la pobreza, de la salud, de la educación, esten dedicados para mantener una prensa amordazada.
Afirmó, Quique Antún, que mediáticamente todo está resuelto a través del 90 % de la prensa, que está en la nómina del Estado, de una u otra manera.
Eso es así, no porque lo diga Antún, sino porque vemos la complicidad de sinvergüenzas vulgares que son capaces de verderle su alma a diablo por dinero y hasta arremeten contra sus colegas que no estan conforme con tantos actos de corrupción impunes.
De ahí que se prestaron a darle un duro golpe a la democracia, haciendo causa común con la Junta Central Electoral (JCE) y sus titíriteros en los dos fraudes cometidos, el ejecutado al Presidente Leonel Fernández, el 6 de octubre del 2019 y cinco meses más tarde el fracazado del 16 de febrero pasado.
Ahora bien, que un delincuente cualquiera enganchado a político o al gobierno arrase con los dineros ajenos bajo su responsabilidad, Ok, eso le toca a la justicia (cuando haya, porque aquí no existe, también está bajo el yugo del Ejecutivo), pero que un sujeto enganchado a periodista, ya sea que lo haya estudiado o no, pero enganchando al fin, obvie la responsabilidad y tire al zafacón la ética periodistica, los valores y principios, por miseros centavos o millones, pero aún siguen siendo miseros, es triste.
Aguardamos a que llegue el momento de que la sociedad recapacite y se de cuenta de que así no podemos continuar y de que le cobre a estos indignos.
Y hay muchas maneras de hacerlo, no solo como se le hizo a César Medina, ya muerto, que celebraron su partida a todo dar, porque para la ciudadanía en su gran mayoría fue una persona miserable, sino ahora, y la más fácil es ignorando los medios por donde pululan esos malvados, porque si nadie los viera y escuchara no estarían haciéndoles tanto daño a esta sociedad.
Esos que aparecen en la composición fotográfica y muchos más son más culpables que sus corruptores, porque al haberlos montado en un buen vehículo, al haberlo dotado de una buena vivienda y de efectivo, nos les importa la suelte de la mayoría que no tiene nada, nada, nada, y cuando decimos nada, es nada, porque en este país no se puede ni descanzar en paz por las, para recuperar las energías perdidas, porque bandas de delincuentes son las que deciden quien y que hora es que vamos a pegar el sueño o cuando nos la vana a interrumpir. Y las «autoridades» bien gracias.
Pero más responsables de estas desgracias son los cómplices de la prensa, los llamados y a quien se nos ha conferido la responsabilidad de denunciar con ahinco los males, para empujar a los que les pagamos a resolverlos, pero no, estos están en la comodidad de la opulencia disfrutando un dinero robado a las arcas del estado juntos con los autores materiales.
Por eso reafirmamos que esos periodistas bocinas, velloneras, altoparlantes o cuanto calificativos se merezcan:
Perdieron el 15 de marzo y volverán a perder el 5 de julio…!!!