Por Sin Reservas
El Partido Revolucionario Moderno (PRM), realizó una Asamblea Nacional, en la que proclamó que su presidente, Andrés Bautista, vinculado a los sobornos de Odebrecht, y contra quien ayer se dictó medida de coerción, es un preso político del gobierno.
En la actividad realizada en el Club Los Prados, con la participación de los presidentes de los organismos provinciales, municipales, frentes de masas y zonales, fue presentado un documento, en el que se establece que «el presidente de esa organización política ha sido vinculado por el Gobierno».
En la asamblea, que contó con la presencia del ex-presidente Hipólito Mejía, el ex-candidato presidencial Luis Abinader, el secretario general Jesús Vásquez, cinco presidentes en funciones y legisladores, se determinó movilizar al partido en defensa de Bautista, al asegurar que es inocente de las acusaciones que le hizo la Procudaduría General de la República.
«A nivel nacional se va a defender la honorabilidad de Bautista, demostrada en las exposiciones realizadas durante el juicio en donde se le dictó medida de coerción, porque no hay pruebas para vincularlo a los actos de corrupción», asegura la organización política.
La asamblea aprobó mantener a Bautista, como presidente del Partido y que sus funciones sean asumida por los cinco presidente en funciones, que son Geanilda Vásquez, Orlando Jorge Mera, Roberto Fulcar, Hugo Tolentino Dipp y Milagros Ortiz Bosch, quien leyó el documento al cierre de la asamblea.
El PRM expresó ayer su rechazo a la sentencia que condena a su presidente, Andrés Bautista, y otros dirigentes a cumplir seis meses de prisión preventiva, al tiempo que se declaró en sesión permanente.
Jesús Vásquez, secretario general de la organización, habló a la prensa en un encuentro celebrado ayer, tras la decisión del juez especial de la Suprema Corte de Justicia, Francisco Ortega Polanco, que dispuso enviar a la cárcel de Najayo y La Victoria a ocho de los implicados en los sobornos de Odebrecht.
Jorge Mera, presidente en funciones, aseguró que el presidente Danilo Medina, decidió entrarle al partido, en la persona de Bautista y otros dirigentes, que según dijo, su único pecado es ser miembro del principal partido de oposición. “El PLD no va a jugar con nosotros y vamos a ganarle el poder en el 2020”, dijo.
Dice que Andrés Bautista, Alfredo Pacheco, César Sánchez y Roberto Rodríguez, son presos políticos de Danilo Medina y el Gobierno, por lo que asumen su defensa.