Por Washington Cabello
(CONDADO DE BAY, La Florida, Estados Unidos).- El imponente y peligroso huracán Michael, de categoría 4, de la escala Saffir-Simpson, se degradó a tormenta tropical, no sin antes sus vientos catastróficos azotar el noroeste de La Florida y dejar un panoráma desolador, con dos personas muertas.
Las víctimas fatales son un hombre de Greensboro y una niña, de 11 años de edad, de Georgia, lindante con La Florida, los cuales murieron por la caída de árboles sobre sus viviendas. Se teme que los muertos aumenten a medida que avancen las labores de rescate.
En el caso del hombre, la oficina del alguacil del condado Gasden, al que pertenece Greensboro, dijo que los servicios de emergencia no pudieron llegar con prontitud a socorrerle debido a que las carreteras estaban bloqueadas por árboles y postes caídos
Las autoridades de La Florida, dieron orden de evacuar la costa del Golfo de México, a 375 mil personas. La medida abarcó 22 condados desde la frontera con Alabama, hasta el centro norte del estado.
Michael, que tocó tierra por el Condado de Bay en La Florida, con vientos de 155 millas por hora (250 kilómetros por hora), dañó y destruyó miles de viviendas, muchas desde sus cimientos, arrasó con miles de árboles y arbustos, arrancó y destruyó anuncios y letreros, tumbó postes del tendido eléctrico y dejó a miles sin electricidad.
El huracán se movió rápidamente sobre Florida, Georgia, Carolina del Sur y Carolina del Norte, antes de regresar al océano Atlántico. Se prevee que concluya mañana sobre las Carolinas como tormenta tropical.
Aunque ahora es tormenta tropical, Michael, que se dirige al Atlántico, representa peligro a su paso por el sureste de los Estados Unidos.
El más reciente boletín del Centro Nacional de Huracanes (NHC), indica que el centro de Michael, se encuentra a unas 40 millas al oeste-suroeste de Columbus, en Carolina del Sur y la tormenta se mueve a una velocidad de casi 21 millas por hora (33 km/h) que irá en aumento a lo largo del día.
Actualmente se encuentra cruzando en la parte central de Carolina del Sur y después pasará por áreas de la parte central y oriental de Carolina del Norte y el sureste de Virginia.
Se espera que registre un fortalecimiento antes de llegar al Atlántico esta noche o a primeras horas de mañana, día en que girará hacia este-noreste con velocidad superior a la actual.
El gobernador de La Florida, Rick Scott, definió a Michael, como un ciclón monstruoso, y solicitó al presidente Donald Trump, una declaración de desastre mayor para los condados afectados.
Scott, escribió en Twitter, que varios equipos ya están trabajando para restaurar la luz y recoger los escombros y pidió a los habitantes de la zona que se mantengan alejados de las calles para que estos equipos puedan trabajar. Y agregó que:
«Las calles están cerradas por su seguridad. Recuerde que no se puede tocar las líneas eléctricas caídas ni conducir en condiciones peligrosas».
Gran parte de La Florida se encuentra inundada, mientras las precipitaciones continúan y alrededor de 360 mil viviendas y comercios se encuentran a oscuras, por la falta de energía electrica, principalmente el Condado de Bay, en donde el ciclón tocó tierra, que el 98 por ciento está a oscuras, informó el Equipo de Respuesta de Emergencia del Estado (SERT, en inglés).
El canal de información meteorológica Weather Channel, cifró en 900 mil, el total de hogares y negocios sin electricidad en Florida, Alabama, Georgia y las dos Carolinas.
El mismo medio publica fotografías de algunos tramos de la carretera US 98, que discurre por la costa oeste de Florida, destruidos por la entrada del mar, que llegó a subir de nivel hasta 14 pies (4,2 metros) en algunas zonas. Otras imágenes muestran un panorama dantesco de Mexico Beach, reducida a ruinas.