Por José Luis de la Calva
Cuando sientas que tienes menos de lo que mereces o que tu vida es difícil, solo debes leer la historia de Rahama Haruna (19).
La joven nació sin gran parte de su cuerpo y vive en una cubeta; es solo cabeza, tronco y unas diminutas extremidades superiores Aun así, la nigeriana se considera “afortunada”.
“He aprendido a crecer sin amigos en la vida. Mi familia son los únicos amigos que tengo. Me llevó mucho tiempo comprender que no todas las personas son iguales. No me importa. Me considero afortunada de estar viva”, expresó la joven en una reseña del diario La Voz de Galicia.
Haruna -quien no se quita su pañuelo rojo de la cabeza- vive junto a su familia en Warawa. Desde allí se traslada todos los días 25 kilómetros (15.5 millas) dentro de la palangana hasta el centro de la ciudad de Kano para pedir limosna.
Es su hermano de 14 años quien la carga.
La historia de Haruna se volvió viral luego que el fotógrafo freelance Sani Maikatanga -a pedido de un ex corresponsal de la BBC- la contactara para hacerle entrega de una silla de ruedas. Fue entonces cuando Maikatanga aprovechó y captó con su lente la sonrisa y el espíritu de la chica.
Tras compartir las imágenes en Facebook, la publicación ha sido compartida por decenas de usuarios y muchos se han ofrecido a ayudar a la africana y a su familia.
…Te seguirás quejando de lo que crees aun no ha tenido la dicha de tener? Las sagradas escrituras dicen «Dar de gracia lo que de gracia ha recibido».
(Fotos: Facebook/Zuma Times Hausa/ tomado de La Prensa de Florida Central)