Por Maximino Brito Lazala Mientras la voz de una bellísima mujer cantaba «Por Amor», un finísimo amigo se asomó a la puerta, me abrazó y emocionado dijo ven, ven, esta aquí David Ortiz, le sonreí y sentí una profunda satisfación porque he dado seguimiento a este extraordinario atleta y sobreviviente de la adversidad, que había sido galardonado al SALÓN DE LA FAMA, donde hizo que hubiera un derroche de la Dominicanidad, y siempre porta una…