Por Sin Reservas
Creemos que cualquier país es soberano para decidir que hacer con sus recursos, y ninguna institución en este caso la Organización Mundial de la Salud (OMS) aún pertenezca o sea miembro tiene la autoridad para obligarle a tributar.
Y en el país que nos acupa, los Estados Unidos, mucho menos, pues es el que mayor aporta para sostenerla, pero tras la puesta en circulación por el dictador de China, Xi Jinping, del virus Covid-19 o coronavirus, esta institución ha tenido un proceder muy sospechoso y dado un manejo complice al .
Esto hizo que el Presidente Donald Trump, congelara la contribución a la OMS el pasado 14 de abril y le diera un ultimatum el día 21 de mayo, pero Tedros Adhanom Ghebreyesus, hizo caso omiso, por lo que el Presidente decidió utilizar esos fondos que ascienden a aproximadamente US$450 millones cada año, en algo más útil.
«La única forma de avanzar para la OMS es si realmente es capaz de demostrar independencia de China», dijo Trump
Tras la decisión António Guterres, secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU) cometió el atrevimiento de advertirle a Trump, «ahora no es el momento” ni para cuestionar al organismo ni para cortarle los recursos».
«Una vez hayamos pasado la página de esta epidemia, debe haber un momento para mirar hacia atrás y comprender cómo surgió esta enfermedad y cómo propagó su devastación tan rápidamente en todo el mundo, y cómo todos los involucrados reaccionaron a la crisis. Pero ahora no es ese momento», dijo.
A lo largo de sus más de tres años en la Casa Blanca, a Trump no le ha temblado la mano para romper con el consenso internacional al retirar a Estados Unidos de la Unesco, del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, del Acuerdo de París sobre el cambio climático y del pacto nuclear con Irán.
