Por José Luis de la Calva
(LONDRES, Gran Bretaña).- El pago con la huella digital es un sistema que se viene implementado desde algo mas de cinco años y ahora llega al supermercado de la cadena británica Costcutter.
Ya el pago con el sistema biométrico, había sido puesto en marcha en España por un grupo de jóvenes de Barcelona que en el año 2009 tomaron la iniciativa de crear un sistema y ponerlo a prueba una ferretería de Montmeló y en un hotel en Ibiza, donde los clientes con solo sus huellas dactilares hacían efectivo sus compras. Vídeo:
Asimismo en Francia, para el año 2012, una cadena de supermercados lo puso a prueba con 1,500 voluntarios que pagaron con solo colocar sus dedos, aunque en esta, si debían tener cerca sus tarjetas de créditos, la ventaja es no tener que estar buscándolas entre sus carteras, ni toamr el riesgos de perderlas o que sean robadas. Vídeo:
Ahora la cadena británica de supermercados Costcutter ha implementado en una de sus tiendas un sistema denominado ‘Fingopay’ que permite a sus clientes pagar sus compras mediante la huella digital o con solo la lectura biometrica de sus dedos.
En concreto, esta tecnología funciona a través de un sistema de infrarrojos que escanea las venas de los dedos y vincula el mapa biométrico a las cuentas bancarias de cada comprador. Dichos datos bancarios se guardan en el proveedor de pagos Worldpay, del mismo modo que se podrían almacenar al hacer compras de productos a través de internet.
De esta forma, los compradores que acudan al establecimiento que Costcutter opera en el campus de la Universidad Brunel de Londres no necesitarán de efectivo ni tarjetas de crédito, ya que podrán pagar simplemente escaneando la yema de sus dedos.
La empresa desarrolladora de este programa es Sthaler y ha confirmado que está negociando con otras cadenas británicas su futura implantación. Desde la compañía londinense subrayan que este sistema de pago es el más seguro puesto que “no puede ser copiado o robado”.